Subida al Pico San Millán (Burgos)

Buen madrugón, buena mañana y una magnifica excursión por delante.
Son la siete de la mañana, y tras esperar los 15 minutos de rigor salimos hacia Pineda de la Sierra, una preciosa localidad típica de montaña.
Aparcamos los coches, revisamos las mochilas para no olvidar nada y comienza la excursión.
A pocos metros del final del pueblo dirección Burgos, callejeamos por Pineda. Llegando al frontón parte una pista hacia los depósitos de agua, donde comienza la ascensión (1200 m). Cruzamos un bosquecillo y a partir de allí no hubo pérdida. Fuimos subiendo por praderas y llanos, siempre con el San Millán a nuestra derecha y el Trigaza a la izquierda. Tomamos altitud poco a poco y tras una buena rampa todavía por pista forestal, giramos a la derecha, abandonamos la pista (km 4 – 1550 m) y continuamos por sendero bien marcado y con numerosas presencia de hitos de piedra que nos indican el buen camino.

Encaramos la ascensión directos al Trigaza. Seguimos ascendiendo y tras reagrupar el grupo decidimos parar a almorzar antes de acometer la parte más dura de la ascensión (km 6 – 1730 m).
Recuperadas las fuerzas reanudamos la marcha. Nos espera un kilometro muy duro, que nos llevara a la línea de cumbres rodeando el Trigaza (Km 7,3 – 2010 m). Aquí las vistas son magnificas, incluso conseguimos divisar el Pico San Cristóbal en la lejanía.

Continuamos cresteando en un continuo sube y baja con el San Millán cada vez más cercano. Descendemos hasta el Collado Flecho (km 9 – 1900 m) desde donde afrontamos la última ascensión que nos llevara a la cima del San Millán (km 10,5 – 2131 m)

Admiramos una magnifica panorámica desde la cima. Vemos San Lorenzo, Urbión y Lagunas de Neila (cara norte todavía con algo de nieve), Pico Mencilla y pico Trigaza.

Después de descansar y reponer fuerzas empezamos el descenso, llegamos a Tres Mojones (km 12 – 1900 m) abandonando la pista que lleva al puerto del Manquillo, girando a la derecha directos a Pineda.
El descenso se hace largo y empiezan a aparecer muestras de cansancio en el grupo. Recorremos la loma de los Helechales (km 16 – 1500 m) con Pineda ya en nuestro horizonte.
Último tramo de descenso, gran pendiente y mal terreno, que nos lleva a Pineda (Km 19,5 – 1200 m) donde damos un merecido descanso a los pies con el agua más que fresca del rio.
Comida acompañada de unas buenas cervezas y regreso a San Leonardo.